domingo, 30 de noviembre de 2014

LLEGA EL MOMENTO PARA UN GRAN CENTRO (RADICAL)

Enhorabuena por el órdago de Ciudadanos a Rosa Díez, que significa una rotura aparente de las negociaciones, pero también una merecida reivindicación de la actual solvencia política de C's. Es sin duda el principio de su consolidación en toda España, al margen de una UPyD cuyos votantes quizá empiezan a sentirse hoy más Ciudadanos... Personalmente, he tenido dudas durante años pero mi voto ya lo tienen por este paso y porque han empezado a hablar de Centro RADICAL (una palabra valiente que significa "FUERZA", "DECISIÓN" e "INMEDIATEZ"); y también por los primeros indicios de una comunicación más inteligente y juguetona en las redes sociales.
Ahora que todos van a pretender ser "de Centro de toda la vida" es el momento de tender puentes a Vox y a todos quienes estén dispuestos a sumar renunciando a protagonismos, condiciones y amarguras, en torno a un líder joven y fuerte: Albert Rivera, a quien he criticado bastante hasta hoy mismo que -por fin- me ha convencido. Coincido con el gran Pedro J. Ramirez, con Manuel Conthe y con muchos otros que proclaman la NECESIDAD de que el joven catalán lidere por fin un "Centro de Soluciones" para España, quizá aún con una Rosa Díez que sepa ponerse en un segundo plano como hizo Hillary Clinton en USA. El mayor granero de votos de la historia de nuestra democracia está ahora en los descontentos del PP y del PSOE. Pero, a la vista de la brutal comunicación que está desarrollando Podemos... ¿será Albert Rivera tan inteligente como para diseñar una nueva marca para ese Centro más poderosa que el pobre código anaranjado con el que funciona discretamente C's? Para aportar mi grano de arena, ahí va un avance de la idea que ya le he propuesto a Ignacio Aguado, responsable de Ciudadanos Madrid, para presentar una marca de Centro más fuerte y convincente a las Elecciones Generales: se trata de una "C" en forma de DIANA a la que apunta una flecha formada por las formaciones políticas, las opiniones y los anhelos de los millones de españoles que no estamos atados a izquierdas ni derechas pero queremos SOLUCIONES INMEDIATAS. Y los colores son los de nuestra bandera nacional, predominando el amarillo sobre el rojo para honrar a la importantísima base catalana de Ciudadanos. ¿Qué os parece?

lunes, 24 de noviembre de 2014

ESPAÑA SIGUE SIENDO UN PAÍS DE PANDERETA

Conociendo el nivel de nuestros políticos, comprendo que se la cuelen a FAES, a la Vicepresidenta y al resto del Gobierno, pero a los letrados de Manos Limpias y al CNI... Porque según Nicolás, el pequeño iluminado de 20 años... "fue enviado por el Gobierno a arreglar lo de Cataluña". En fin, pasemos a temas más importantes.

viernes, 7 de noviembre de 2014

EL HOMBRE QUE PUDO REINAR... (PERO NECESITABA A LA BRUJA DEL CASTILLO)

No soy un apasionado de la política pero ayer asistí por curiosidad periodística y por el consabido cabreo nacional a mi tercer acto de ese fenómeno político que todos conocemos ya como Ciudadanos (C's). Son esa gente valiente de Barcelona que se presentaron a unas elecciones locales en pelotas, con un simple cartel tapando sus vergüenzas que seguro que también las tienen. Nos llamaron la atención en muchos puntos de España por su atrevimiento y desparpajo, porque hoy día las noticias vuelan. De hecho, ayer pude comprobar en un pequeño acto con 30 bienpensantes en un viejo café de Madrid que Ciudadanos ya son gente de Córdoba, Sevilla o Pamplona; allí estaban sus propios, un puñado de voluntariosos afiliados y simpatizantes de diversas localidades, re-clamando al partido un apoyo que parece no les llega. Decían que no contaban con medios ni con una coordinación básica en sus nuevas delegaciones, a lo que se les contestaba que "cada cual se busque la vida". Es la misma frustración que sentí semanas atrás en otro acto de Ciudadanos en el modernísimo Hotel Puerta América, donde el líder Albert Rivera se excusaba ante varios centenares de fans por no poder partirse en dos o en tres para atender el hambre de soluciones en Madrid o en Sevilla, porque de momento su lucha está en Cataluña. Es la puta realidad, es lo que hay: he comprendido que el niño todavía es un bebé y, por mucho que le necesitemos, no crecerá a tiempo para que los que hemos cumplido los 40 le veamos llegar al altar (tampoco Rosa Díez será la novia porque se quedará para vestir santos). Nosotros, los cuarentones, somos la generación que exigimos un "centro de soluciones inmediatas", un Centro equilibrado que difícilmente tentará a los más jóvenes (que ya tienen una opción radical más molona) o a los más mayores que nunca se apearán de sus viejas consignas. La gran bolsa de votos indecisos, el último elemento del nuevo universo político, somos varios millones de asteroides sin un punto de atracción en torno al cual girar… de forma que, si no ocurre un acontecimiento cósmico, cada indeciso vagará perdido por la galaxia estrellándose contra lo que se encuentre a su paso de aquí a las próximas elecciones.

Albert Rivera, probablemente el mejor político de la nueva hornada si rechazamos la mentira como arma política válida, vive su particular cruzada en Barcelona. Es un joven santo (de momento) que se enfrenta a las brutales legiones romanas seguro de su crucifixión en pocos meses... menudo circo de leones se avecina en el Parlamento catalán, tras la renuncia del gobierno español a frenar un referéndum de pacotilla que igualmente romperá España antes o después. La batalla la tenemos perdida los españoles y sobre todo Ciutadans porque la nena catalana se va; no sabemos dónde, pero este domingo se marcha de casa con la bendición de papá Rajoy y con los favores que le pusieron en el bolsillo los tíos Felipe, Zapatero y Aznar. A la bella "Cata"
la han malcriado entre algodones de azúcar durante 30 años y el próximo domingo 9-N pegará un portazo y se largará con todo lo que pueda arramplar. Quizá entonces el joven Albert se dé cuenta de que su futuro está en Madrid.
Y tras un estirón previsible, hacia 2020, también quizá esté preparado para batirse el cobre en un escenario post-apocalíptico en el que PP, PSOE y Podemos llevarían 4 años destrozando un país que según parece va a reventar por sus costuras. Y sólo quizá en ese momento se den cuenta de la oportunidad perdida, de la falta de visión que tuvieron durante este año 2014 en el que España por fin maduró políticamente y se levantó contra sus Señores diputados e imputados, entregando un buen cacho del poder al nuevo líder de la manada, al único lobo que supo convertir unos miles de perro-flautas en millones de votantes de todo signo a su favor. Porque esos cabroncetes y bolcheviques profesores de facultad han enfocado mejor que nadie la oportunidad política, creciendo exponencialmente al grito de "Sí se puede", mientras los anhelantes cachorros de Ciudadanos se tienen que conformar con un "De momento no podemos".

Y da rabia: comprobar que SÍ ES POSIBLE dar el campanazo cuando se reúnen la voluntad, la experiencia, la astucia, el descaro y la oportunidad política. La encuesta del CIS acaba de poner a cero el contador de nuestra blandocracia, finiquitando 30 años de estabilidad que terminaron estableciendo a decenas de miles de políticos y empresarios en casoplones de cuatro millones de euros en las mejores urbanizaciones de nuestras capitales y de nuestras playas más privilegiadas, a golpe de sobornos, cohechos y despilfarro por doquier. Ahora veremos si el pueblo se cobra su venganza o si el poder también corrompe a los de la coleta y lo primero que hacen es contratar un buen agente inmobiliario para elegir sus merecidos chaletazos en Marbella. Y doy por hecho que Pablo Iglesias puede gobernar porque su órdago es brutal: "O Pedro Sanchez me hace presidente o tendrá que retratarse apoyando al PP". No necesita ganar las próximas elecciones generales -ni creo que lo haga- porque le basta conservar lo que ha logrado (el tercer puesto en intención de voto real en el CIS) y canjearlo por votos dentro de un año. Sólo podrá impedirlo el voto oculto de centro -si asoma- y el voto arrepentido de los indignados del PP; porque el PSOE ha hecho sus deberes colocando un guapo pirata del Caribe al frente de un barco que hace agua pero que se mantendrá a flote conservando a la mitad de su electorado, pactando finalmente con el corsario Pablo Iglesias para mantener un efímero papel primario o secundario en el teatrillo de las Cortes. Ante este escenario, los votantes útiles -los 4 millones que fluctúan y deciden las elecciones en España- vamos a tener que elegir entre taparnos la nariz y votar al PP para evitar el caos o taparnos los ojos y votar Podemos para que esto reviente y al menos la marea se lleve por delante a los corruptos que conocemos. Esta comedia se llama "El Tripartidismo" y me recuerda al clásico "Con faldas y a lo loco" con un un patético viejo Jack Lemmon, un guapo farsante Tony Curtis y una fulana rubia que iba a por todas. Seguro que bajo la peluca rubia platino de la apetecible Marilyn descubriremos pronto a un Pablo Iglesias travestido y encastado, disfrutando los beneficios de Bruselas que -por cierto- invierten o "donan" ya a su propia productora de TV pese a haber comprometido dedicar los excedentes a supuestas causas sociales.

Estos revolucionarios de camisa blanca televisiva se van a beneficiar del pánico que ha generado esta encuesta del CIS, que significa más y más minutos de publicidad gratis en prime-time: pero no sólo en la Sexta que tan convenientemente apadrina el grupo A3 Media (siempre conviene repartir las manzanas en varias cestas, por si algún día ganan los otros), sino en todas las cadenas de televisión y medios impresos y digitales, ávidos de contenidos cautivadores, hambrientos de las noticias que al fin y al cabo les llenan la panza. Y éste es precisamente el talón de aquiles de Ciudadanos: llevan muchos meses sin dar un titular a los medios; Albert Rivera ha madurado su discurso pero cada día es más ortodoxo y su coherencia comienza a aburrir en las tertulias más influyentes de la TV; por otra parte, los flamantes eurodiputados de Ciudadanos parecen exiliados en Bruselas o, más bien, desaparecidos en combate. ¿Dónde está el contundente Javier Nart al que muchos esperamos desde el verano para que rinda cuentas de su incipiente labor como eurodiputado? Yo esperaba verle cada fin de semana en Madrid y Barcelona, acaparando las tertulias radiofónicas y televisivas, presentando a sus compañeros de aventura para ponerle cara a esos Ciudadanos por el Mundo... pero todavía no le he visto aparecer. Me decían ayer en este encuentro con Ignacio Aguado (portavoz en Madrid de Ciudadanos) que el abogado estuvo hace poco tiempo en algún programa de la Sexta. Pues me quedo más tranquilo... Resulta que el mejor producto político de la década (con permiso de Podemos) se va a quedar en lo que fue el precursor de la Coca-Cola: ese tónico del doctor X que se vendía en un carromato de pueblo en pueblo; pero en aquel caso algún avispado lo rebautizó como la marca roja y se popularizó en todos los Estados Unidos de América, donde el marketing hace grandes a los buenos productos. Aquí, por contra, tenemos una propuesta refrescante a la que se le fue el gas antes de abrirla, una especie de UCD 3.0 tan interesante como invisible… justo cuando la izquierda y la derecha en España dan miedo o dan asco. ¿La oportunidad del siglo, perdida? Revisemos...

Después de unos buenos años de acción el partido anaranjado no tiene más referentes sociales comprometidos con su causa que el espíritu ausente del tertuliano Javier Nart: ni dignos veteranos, ni políticos de otros grupos reconvertidos para la causa, ni doctos catedráticos, ni guapos actores, ni periodistas influyentes. Tampoco se han nombrado todavía candidatos a las municipales ni los han sacado de democráticas primarias. Ayer nos explicaban que no es bueno destapar demasiado pronto a las figuras, no vaya a ser que pase como con Alejo Vidal Quadras en VOX, que "se quemó demasiado pronto"... desafortunada comparación porque ese viejo candidato nació ya muerto, era un cadáver al puro estilo rancio del PP que nunca debió abanderar esa iniciativa, que partía con cierta nobleza y méritos pero se estrelló justo al despegar. La verdad es que Ciudadanos de momento sólo es Albert Rivera
y ya está tardando el chico en presentar a su Monedero y a su Errejón (los otros ya populares impulsores de Podemos) y a varias mujeres valientes que le den referentes a las aspiraciones femeninas de Centro, que son más que las nuestras. Ciudadanos ha entrado en un discurso de párrafo largo y aburrido en plena era 3.0 de titulares digitales de cinco palabras: basta ver el único pan-fleto que nos ofrecen en los actos (una octavilla con 30 líneas escritas y una foto en B/N) y compararlos con la comunicación de sabrosos "pinchos y canapés verbales" que aún el PSOE (desde siempre buenos comunicadores) y ahora Podemos están dando al personal: "Vota ZP", "Un cordón sanitario alrededor del PP", "El cielo se conquista al asalto", "No soy el macho alfa", "Acabemos con la casta"... Los simpatizantes, los afiliados y los voluntariosos colaboradores de Ciudadanos NECESITAN URGENTEMENTE escuchar, aprender y practicar un lenguaje directo, cercano y sorprendente, al más puro estilo YOIGO (recordemos esa genial campaña de la "Verdad, verdadera" llena de preguntas-respuestas convincentes) para mantener su ilusión mientras duren las Cruzadas catalanas del líder. Lo necesitamos también los millones de votantes que desde hace meses rebuscamos en los contenedores de esta política tan maloliente una nueva opción limpia y brillante de Centro. Estos millones de españoles de las clases medias, empobrecidas aunque no destrozadas por la Crisis, necesitamos más titulares peleones, nuevas etiquetas controvertidas que sorprendan a los medios, ocurrencias tontas o listas como -por ejemplo- un cómic llamado los "GatoPianos", donde los personajes en lugar de perro en la calle tienen gato en casa y en lugar de flauta tocan el piano o la guitarra porque son una generación más cultivada... una cascada de invenciones que atraigan la atención de los medios y la curiosidad del ciudadano. Necesitamos iconos gráficos más sólidos que el simple "bocadillo naranja" del logo (C's) y una marca más atractiva para lucir como reafirmación de esa ilusión que Ciudadanos nos pide con un susurro en su triste octavilla. Somos Indignados (y +/- cabreados) que nos resistimos a comulgar con el discurso envenenado de un Pablo Iglesias heredero del marxismo, pero tampoco nos conformamos ya con planteamientos blandos como "ser un buen Ciudadano que no debe alzar demasiado la voz". Necesitamos un mensaje RADICAL (si te da miedo este término, cámbialo por DEFINITIVO) de equilibrio y compromiso de acción inmediata e inteligente. Los nuevos indignados somos los últimos "singles" que aún buscamos pareja política y -sinceramente- somos un buen partido; pero no estamos en las plazas ni en las calles protestando; ¿estamos en internet? sí, pero estamos mucho más en las oficinas, en las colas del paro, en los bares y en los hogares. Y resulta que hoy mismo estamos todos... hablando de Podemos.

Esta irrupción del voto útil y organizado a favor de la extrema izquierda, fruto del cabreo más elemental, era previsible desde el histórico 15-M -ya lo adelanté en mi blog hace cuatro años-, sólo era cuestión de tiempo que alguien lo capitalizara. El derrumbe tan rápido en sólo dos años del PP era más difícil de prever, pero no el desgaste de sus votantes ocasionales y la aparición de un hueco de mercado en el centro del panorama a final de esta legislatura. Ahora, de repente, surge la extraordinaria oportunidad de obtener una notoriedad más rápida, casi fulgurante, servida en bandeja de plata esta semana por la encuesta del CIS, que ha puesto en pánico a la derecha y en alerta a los 5 millones de españoles que no estamos comprometidos con PP ni PSOE. Lo acaba de destacar el valiente Pedro J. Ramírez ayer mismo en Al Rojo Vivo de La Sexta y este señor sabe mucho más que un servidor: "Es el momento de que UPyD y Ciudadanos den ese paso al frente para lograr en pocos meses el milagro que ha logrado Podemos". Estaba en boca de todos pero nadie lo había dicho tan claro. Y sobre las negativas de Rosa Díez para el bonito enlace, basta ver en el estudio del CIS que ellos pierden también fuelle y la única salvación para ella (y para sus seguidores) es adoptar el ejemplo de Hillary Clinton poniéndose a la sombra de Obama, lo que a fin de cuentas ha revivido su figura política. Ella es la bruja del castillo y Albert el joven príncipe, el paladín… de eso no hay duda; pero puede ser la bruja buena o la bruja mala, a la Señora le toca decidir. Ya pasó Halloween, las Navidades se acercan y para ese momento, en que todas las familias españolas se sientan a conversar y confrontar anhelos y deseos, debería haber ocurrido algo grande en el Centro político. ¿Tiene Ciudadanos algo preparado?
Personalmente, yo construiría ya el Arca y cuando venga el diluvio de las municipales que se ponga a salvo quien quiera... patos, leones, elefantes, arrepentidos del PP o votantes de Vox. UPyD no van a tomar ninguna iniciativa compartida. Pero os apuesto unas cañas a que Podemos ya tiene preparadas varias bombas para animar nuestras cenas navideñas, para que nietos convenzan a abuelas y cuñados hagan propaganda gratuita del "ideario de Centro" de Podemos. Sin embargo, los listillos de la formación violeta han decidido que su marca no debe quemarse en las municipales; por eso Podemos no estará en los municipios ni en las autonomías y esto abre una enorme oportunidad política: quien se haga con el Centro en las municipales de mayo, tendrá la "pole" para las generales de noviembre. En política se trabaja con antelación, imaginando escenarios y sugiriendo planteamientos. Pero antes de nada hay que corregir errores y el primero es la falta de una imagen nacional poderosa para Ciudadanos, la ausencia de un discurso más conciso y vibrante, y la falta de rostros que arropen a Albert Rivera y que le cubran en las tertulias, programas y actos en los que él no puede estar los lunes, martes, jueves, viernes, sábados y domingos… porque parece que Albert viene a Madrid sólo los miércoles. Sobre la web y las redes sociales, faltan conceptos más sintéticos y un mapa de crecimiento que genere ilusión, foros abiertos y accesibles, juegos que alegren la travesía... basta fijarse en la variopinta propaganda y merchandising de la Generalitat por la independencia (hecha con dinero del contribuyente, claro). Sobre los eventos de Ciudadanos, sólo pedir cierto equilibrio entre la obligada austeridad de ayer en el Café Comercial (hay otros locales menos tristes capaces de generar un marco de ilusión) y la horterada tremendista que organizaron en el Hotel Auditorium de Barajas para las pasadas europeas con una coral pisoteando nuestro himno español con una supuesta letra de Sabina: "Ciu-da-da-nos, Ta-chín-Ta-chín-Ta-chín..." lo que, a un servidor, le hizo levantarse y abandonar el acto. Ah, de paso que os ponéis... la dirección de la sede en Madrid y en otras localidades podrían aparecer en la web y en facebook, que yo no fui capaz de encontrarla ayer. Y os dejo porque en esta misma tarde el fenómeno portavoz del PP Carlos Floriano está justificando la última fechoría de uno de sus dirigentes: 32 vuelos en primera clase del presidente extremeño Monago para visitar a su amante colombiana en Canarias, a cargo del inútil y carísimo Senado que todavía pagamos entre todos. Alucinante.